Era hija de padres nobles muy ricos. Su padre murió cuando era muy niña. Era una joven muy bella y su madre quería casarla, pero ella había decidido entregarse en cuerpo y alma a Jesús. El joven que la pretendía se puso furioso cuando ella no consintió en casarse y la amenazó con torturarla. Le sacaron los ojos, pero por un hecho milagroso, recuperó la vista. El juez la condenó a ir a una casa de prostitución, pero su cuerpo se hizo tan pesado repentinamente que no pudieron moverla. Al fin fue mártir en el 304. Es patrona de las enfermedades de los ojos.
¿Qué cosas tienes que mirar con atención y cuidado hoy?